viernes, 24 de agosto de 2007

Un poco de actualidad personal.

El día de hoy me voy de viaje. Regreso otra semana más a Buenos Aires y me voy con mi padre. Tengo muchas expectativas por este viaje y por el tiempo a compartir con el cocho. Además que es un placer regresar a Buenos Aires.

Mas bien, lo que si voy a dejar un rato es estar pendiente del blog. No es la primera vez que no posteo seguido, y posiblemente no será la última. Sin embargo, a diferencia de las veces anteriores, ahora ni siquiera leo los blogs. Salvo el de autoliniers y el de Laura, en los demás se me han acumulado las entradas terriblemente. tengo como 700 entradas sin leer y lo mas seguro es que no las lea en absoluto.

Lo que me mortifica por que de rato en rato me viene a la mente que estoy descuidando algo que es bonito y significó mucho tiempo. Así que, voy a dejar de postear. Si me sale un post, genial. Si no, ni modo. Luego de esta etapa van a pasar dos cosas: o regreso con fuerza o me termino de ir. Veremos que hay.

En mi sazón urbana no posteo hace meses. En Debutante entré en para hace ya varios días. Hoy dejo a Digo, el mayor, el consentido, el mas querido. Supongo que de rato en rato vendré a actualizar algo o poner una cosa que otra pero nada que se pueda llamar, con propiedad, bloguear.

A ti que lees esto, a tu que leíste alguna vez algo acá. Gracias por venir, cada numerito en el contador de mas abajo me alegró mucho.

Despues de todo, nada dura para siempre ¿no? Digo, es un decir.

viernes, 17 de agosto de 2007

Al tomar un taxi 3: Vaya la pregunta

Me olvidé contar esta. El miércoles a las 11:00 tomé el taxi rumbo a mi casa. Luego de negociar el precio, me despedí de Ernesto y me senté a esperar que me lleven, sin mas sobresaltos, a mi casa.

De pronto, como queriendo iniciar conversación (con el recurrente tema que aún hoy sigue siendo exclusivo), el taxista me pregunto:

"¿Sintió el temblor?"

¿Qué esperaba que le diga? Que no sabía de qué me hablaba? Acaso hay alguien en esta ciudad que no lo haya sentido. En fin.

Pensé que se refería a la réplica. Así que le pregunté a mi vez: "Qué, hubo réplica?"
A lo que me respondió: "No, si sintió el grande".

Plop.

Eso me pareció a aquella vez que llamé a la casa de alguien (teléfono fijo) y le pregunte "¿dónde estas?" Digo, es un decir.

¿Sabes ...

cuánto cuesta un botellón de 7 litro de agua?

Cinco soles.

Ahora que lo sabes, ¿qué haces leyendo blogs y no sales a comprar un par de botellones y los donas para que los manden a Ica?

El cuerpo humano puede vivir días sin comida, sólo horas sin agua.

Y si estas gordito como yo y no te has hecho un tatuaje, pues a dejarse de mariconadas y anda dona un poco de sangre, un litro no te va a hacer diferencia.

¿Qué?

¿Que ya ayudaste?

Ah bueno. Entonces sólo pongo unas ideas antes de irme al hospital.

1. Digan lo que digan, yo me quedé sorprendido ya que a pesar de la magnitud del problema, no han habido problemas por pánico colectivo. Todos los videos muestran a la gente tomar el terremoto con calma, salir ordenados, pegarse a las zonas seguras. No se ha visto estampidas de personas aplastando niños ni nada por el estilo. Eso es bueno.

2. Desde el miércoles confío aún mas en el edificio en que trabajo. Estuve en el piso 16 y, pegado al par de columnas que están atrás de mi sitio, me moví mas que medio Perú (de eso estoy seguro) y el buen José Pardo resistió como un caballero sin siquiera rajarse.

3.Yo suelo ser muy tranquilo en los temblores. Debo reconocer que esta vez si me asusté. Cuando salí, estas lajitas fue lo único que se cayó del edificio.


4.Estas son las columnas a las que encomendé mi vida.


El próximo temblor, espero me agarre echado en mi cama en un humilde segundo piso. Digo, es un decir.

lunes, 13 de agosto de 2007

10 años


Hoy, hace diez años, se jugó la final de la Copa Libertadores en la que mi esportin querido perdió la oportunidad de ser campeón de América.

Y yo lo conmemoro.


viernes, 10 de agosto de 2007

Vicio

Leí a Javier y decidí ver mi realidad. Esperaba un puntaje bajísimo debido a mi actual dejadez blogsística pero ...

61%How Addicted to Blogging Are You?

Tal parece que estoy peor de lo que pensaba. Digo, es un decir.

La dicha es mucha en la ducha.

Comentando un post en el blog de Mariella caí en cuenta que yo no canto en la ducha. Vamos, hasta donde puedo recordar, he transformado el trámite de ducha, a un paso aséptico pero sin peculiaridad. Es decir, inconscientemente le he quitado todo ápice de inventiva y lo he reducido a "abrir el chorro, controlar temperatura, mojarme, jabón, agua, shampoo, agua, jabón de vuelta, agua, cerrar el chorro y secarme".

Un trámite. ¿Y el canto? ¿Y la frescura? ¿Y el calor del agua tibia? Lo último memorable que me pasó en la ducha fue cuando se me dió por acortar trámites y afeitarme mientras me duchaba y me corté, tal como lo conté acá.

A partir de mañana voy a empezar a cantar algo, aunque sea "Pimpon el muñeco". Digo, es un decir.

Chiste malcriado

Con respecto al partido de ayer donde la crema, nuevamente, perdió un partido internacional.

"- ¿Saben cómo le dicen a la "U"?
- Le dicen brichera fácil.
- ¿Por qué?
- Porque viene cualquier extranjero y se la tira".

Y basta de fútbol por que ... no tengo catadura moral. Pero la volveré a tener. Digo, es una esperanza.

lunes, 6 de agosto de 2007

Cachai?

Un abogado: ¡Carajo!, The Police no viene a Lima y si va a Chile
Otro abogado: Bueno, pero alla no será The Police
el Un abogado: Cómo que no
el Otro abogado: Claro. Allá será "The Carabiners"

Al oirlo, sonreí. Digo, es un decir.

miércoles, 1 de agosto de 2007

Yo admiro

a todo aquel capaz de escribir una buena novela.

Pero no lo admiro por la pericia narrativa o la buena prosa ya que esos elementos son adquiribles, mejorables, entrenables, aprendibles y aprehendibles (debo a mi madre la consciencia sobre la diferencia de "aprender" y "aprehender").

Yo los admiro por la imaginación que desplegaron para crear una historia verosímil.

Y los admiro por que he reconocido mi incapacidad de lograrlo, de poder urdir una historia entera sin que ésta haga agua por todos lados. Yo puedo aprender a escribir bien, pero creo que jamás voy a aprender a tener una imaginación prolífica, que no recuerdo haberla tenido. Siempre he sido un genial "repetidor", aprehendiendo imágenes imaginadas por otra mente.

Seguiré leyendo más historias y, sobre todo, seguiré intentando tejer alguna mía. De repente un día me equivoco y me sale una. Digo, es un decir.