martes, 13 de febrero de 2007

Receso

No quiero escribir.

Esa es la verdad. Hoy me puse a ver que mi ritmo de posts en febrero ha bajado a límintes sólo comparables a cuando inicié el post y todavía andaba temeroso de lo que pudiera poner. Pensé que me encontraba frente a una nueva sequía, como la que me atacó en noviembre y que comenté acá pero veo que no es que no pueda escribir. Es que ya no quiero escribir.

Y no sé a que se deba. Creo que se debe a que no estoy leyendo nada ultimamente y la falta de lectura implica per se, falta de aliciente para la escritura. O tal vez que estoy ensimismado en mi día a día y no puedo ver las cosas rescatables y posteables. En fin.

Hay que reconocer las realidades y decirlas de frente. "Digo, es un decir" se fue de vacaciones. Ya lo habrán notado, supongo.

Espero regresar con fuerza, como antes. Digo, es un decir.

P.D. Hentzau, fue tu ultimo comentario el que me hizo postear esto. Que te vaya bien, donde quiera que estés.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

A veces la inspiracion se nos va de vacaciones, he pasado por eso muchas veces, pero no seas duro contigo, ya regresara y tendras para postear a cada momento....

Nosotros seguiremos aqui atentos esperando que postees para poder comentar :)

Un besito si?

Cuidate mucho y te mando un apapacho grandote ;)

MuA!

Gabriel dijo...

no se preocupe maestro, tomese su tiempo dicen que hasta el tigre da un paso para atras al momento de saltar.. bueno digo es decir... pegajosa tu frase... nos veremos sino en el estadio alentando a los cheleros

Ana dijo...

Que pena, parece que hay una fiebre de gente que no quiere ya nada con su Blog, yo por mi parte, estuve enferma, con un super descanso medico :o(
pero ya estoy intentando regresar, ahora que comprendo lo que dices, porque cuando uno deja de hacerlo, le cuesta comenzar...
SUERTE y espero leerte pronto otra vez,
Suerte amigo!

Dragón del 96 dijo...

Pues no sé si es la falta de lectura... no sé si te lo dije, pero escribir cuando estas cargado de emociones es bien relajante.

Slaudos.