En un post anterior recuperé una vieja frase. "Un amigo puede ser como un hermano aunque a veces un hermano no llegue a ser necesariamente un amigo". Y así como la recuperé me apresuré a señalar que, en particular, ese no era mi caso. Mis hermanos son muy amigos mios. Los tres nos llevamos bien.
Hace unos años nos encontramos para almorzar en el centro de Lima. Coincidimos los tres en la puerta del diario "El Comercio", trabajo de mi hermano mayor, y nos saludamos con un cariñoso abrazo triple. Al levantar la cabeza me topé con la tierna mirada del guardia de la puerta quien nos contemplaba con gusto. Como si ver tres hermanos abrazarse sea un espectáculo raro. ¿Lo es?
El tema es que hoy cumple años mi hermano mayor. Diez años mas que yo que se desvanecen como si no existieran. Las brechas generacionales se topan con un muro infranqueable cuando estamos juntos, es mi hermano con quien comparto risas y chanzas y burlas y fantasias. Entrañable persona, lo único malo es que es del Alianza.
En algún momento esos diez años si hacían diferencia, como cuando yo tenía 11 y el 21 y viviamos en ciudades distintas y pensabamos en cosas distintas. Cuando entré a la universidad eramos casi desconocidos. Antes del inicio del ciclo y ante la ausencia de mi padre, él tuvo que ir a recoger unos documentos a la Católica. Cuando regresó, me entregó los papeles y me dijo "Bienvenido a mi vida". Han pasado mas de diez años de eso y en realidad no fui yo quien llegó a su vida sino que ambos empezamos a tener un hermano, a vivir juntos, a comprendernos. Hoy hacen ya casi seis años que no vivo con él, pero no pasa una semana sin que nos comuniquemos.
¿Hablas de hermanos y amigos? Déjame que yo te cuente, que (gracias a mi hermano) si de algo sé, sé de eso.
Feliz Día, Iván.
Hace unos años nos encontramos para almorzar en el centro de Lima. Coincidimos los tres en la puerta del diario "El Comercio", trabajo de mi hermano mayor, y nos saludamos con un cariñoso abrazo triple. Al levantar la cabeza me topé con la tierna mirada del guardia de la puerta quien nos contemplaba con gusto. Como si ver tres hermanos abrazarse sea un espectáculo raro. ¿Lo es?
El tema es que hoy cumple años mi hermano mayor. Diez años mas que yo que se desvanecen como si no existieran. Las brechas generacionales se topan con un muro infranqueable cuando estamos juntos, es mi hermano con quien comparto risas y chanzas y burlas y fantasias. Entrañable persona, lo único malo es que es del Alianza.
En algún momento esos diez años si hacían diferencia, como cuando yo tenía 11 y el 21 y viviamos en ciudades distintas y pensabamos en cosas distintas. Cuando entré a la universidad eramos casi desconocidos. Antes del inicio del ciclo y ante la ausencia de mi padre, él tuvo que ir a recoger unos documentos a la Católica. Cuando regresó, me entregó los papeles y me dijo "Bienvenido a mi vida". Han pasado mas de diez años de eso y en realidad no fui yo quien llegó a su vida sino que ambos empezamos a tener un hermano, a vivir juntos, a comprendernos. Hoy hacen ya casi seis años que no vivo con él, pero no pasa una semana sin que nos comuniquemos.
¿Hablas de hermanos y amigos? Déjame que yo te cuente, que (gracias a mi hermano) si de algo sé, sé de eso.
Feliz Día, Iván.
3 comentarios:
Muy profundo, quedé conmovida con tu post. Yo no tengo tanto contacto con mis hermanos pero de hecho son personas muy importantes en mi vida aunque seamos tan pero tan distintos. Me uno a tu saludo, feliz dia Iván!
Yo también tengo la suerte de estar cerca de mis hermanos, sobre todo del menor que vive cerquita a mi, con él mataperreamos todos los fines de semana y lo quiero tanto como tu al tuyo.
Tienes mucha suerte, me gustaría ser así con mis hernamos.
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